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La Casa Gucci (House Of Gucci)
- CINECONS
- 26 nov 2021
- 5 Min. de lectura
¡Saquen el outfit más chic! Es nuestra mejor recomendación para que acompañen y disfruten de esta historia (si todavía no lo saben, está basada en hechos verdaderos) dirigida por el legendario Ridley Scott y en conjunto con un elenco de actores y actrices de 1er nivel podremos ver en la pantalla grande como fue que se consumó una de las polémicas más grandes en la industria de la moda y por supuesto que las atenciones se centrarán en Lady Gaga (cantante, filántropa y continuando con su carrera de actriz) al interpretar a la figura principal. La interrogante inicial que surge es: ¿El tener un elenco de lujo garantiza el éxito?, mientras ustedes lo piensan, tomaremos un espresso y contestaremos esta y más preguntas, así que... ¡Andiamo!
El inicio de la trama comienza en los años 70,s con la joven Patrizia Reggiani (Lady Gaga demuestra que sus capacidades actorales tienen esmero y calidad) una secretaria en el negocio de sus padres, un día asiste a una fiesta dentro de una discoteca, ahí conoce a Maurizio Gucci (interpretado por un pensativo ecuánime Adam Driver) sintiendo una inmediata atracción (evidentemente más al conocer su apellido) dándole su número para poder tener la oportunidad de salir y conocerse mejor. Después de pensarlo, Maurizio accede a varias citas empezando, lo que provoca un enamoramiento y pasión profundos entre ambos, así llega el momento en que Reggiani conoce a su suegro y padre viudo de Maurizio, Rodolfo Gucci (Jeremy Irons da vida al personaje dotándolo de vulnerabilidad y terquedad) teniendo una comida entre los 3, Rodolfo se da cuenta de que Patrizia es una joven linda pero interesada exclusivamente en la fortuna de la familia, este desacuerdo provoca una discusión entre ambos provocando que Maurizio sea desterrado de su casa bajo amenaza de quedar sin herencia por parte de su padre, al no tener donde vivir acude a la casa de Patrizia y sus padres dejando las intenciones claras de amar a su hija, quienes lo reciben a cambio de que el aprenda el "negocio de la familia" (tienen unos camiones de transporte). Con esfuerzo, logran casarse en una iglesia donde se juran amor eterno (nadie de la familia Gucci acudió a la boda) continuando con un amor aparentemente sólido; posteriormente se puede ver a Aldo Gucci (la calidad de Al Pacino sigue intacta) hablando con su hermano Rodolfo tratando de hacer que acepte la relación que tiene Maurizio con Patrizia, ante una aparente negativa, Aldo decide llamar a la casa de los Reggiani para invitarlos a su cumpleaños, ante esta noticia Maurizio alega que no está interesado en nada que tenga que ver con su familia y Patrizia le pide que acceda para tratar de mejorar la relación familiar fracturada. En la fiesta de cumpleaños resalta la ausencia de Rodolfo, pero se presenta Paolo Gucci (una peculiar interpretación de Jared Leto), el hijo no muy querido por su padre Aldo (se debe a que no tiene el don de la moda acorde a la visión de la familia); Aldo queda encantado con la relación de Patrizia y Maurizio, así que los invita a a visitar su oficina en Nueva York para incluirlos en el negocio. Paralelamente Rodolfo ha enfermado gravemente y pide ver de nuevo a su hijo para dejar de lado las diferencias y aceptar finalmente su relación con Patrizia antes de morir haciéndole saber que el quedará el heredará todo, al mismo tiempo, Reggiani notifica a Maurizio de estar embarazada.
Patrizia al estar involucrada de forma innecesaria en los negocios de la familia por querer tener la ambición de una fortuna inmensa (sobre todo por la poca autoridad de Maurizio) y ser aconsejada por la vidente Pina (Salma Hayek), provocará daños irreparables en la relación familiar de Maurizio dentro del seno de los Gucci (sobre todo con Aldo y Paolo) traicionando confianzas; con el paso de lo años, la relación sentimental se verá fracturada sufriendo la separación y divorcio de la pareja dejando a Reggiani dolida pero con sed de venganza dispuesta a hacer lo que sea para conservar el apellido Gucci mientras Maurizio intentará rescatar el renombre del imperio.
Estamos ante una trama de drama y crimen elaborado de gran manera en general, Ridley Scott es uno de los mejores directores de los últimos 30 años (resaltando Alien, Blade Runner, Gladiador, Gánster Americano o Hannibal) con una amplia experiencia en la industria cinematográfica, el acto final sorprenderá a quienes no estén familiarizados con la conclusión de la historia en los 90´s sin sentir las 2 horas con poco más de 30 minutos que la componen, en esta ocasión no retrata por completo una historia seria o cruda, Scott ofrece una dirección con enfoques a la vestimenta que portan los protagonistas retratando la belleza de la moda y de los escenarios de ciudades como Roma, Milán y los Alpes italianos, el guion dividido entre Roberto Bentivegna y Becky Johnston se basan en el libro: The House of Gucci: A Sensational Story of Murder, Madness, Glamour, and Greed, escrito por Sara Gay Forden, dotando a la trama de ciertos momentos humorísticos o ligeros para hacer la película más amigable para el público (es importante mencionar que la película a pesar de estar basada en la historia real, no aborda totalmente lo ocurrido cambiando ciertos detalles), destacando los increíbles paisajes en Italia junto con unos vestuarios exquisitos a cargo de la británica Janty Yates quien se dedicó a investigar los diseños Gucci de la época para apegarse lo mejor posible (y vaya que se nota la dedicación para conseguirlo). Una parte fundamental para lograr la belleza de la cinta es el elenco que la compone, tiene un cast bastante amplio y rico lleno de estrellas de Hollywood destacando los talentos de Gaga, Adam Driver y Al Pacino, quienes logran llenar a sus personajes de manera correcta con personalidad propia resaltando una química atractiva y luciendo unos correctos acentos italianos, destacando también la actuación de Jeremy Irons a pesar de no tener muchos minutos en pantalla, su calidad es incuestionable; ahora, apartamos la actaución de Jared Leto, es un actor de excelente nivel al que le atrae mucho lograr cambios físicos radicales, algunas de sus interpretaciones logran dividir entre la crítica y el público (es parte de la esencia de su actuación) y esta ocasión no es la excepción, habrá quienes queden fascinados con su rol en el personaje menos brillante de la familia Gucci junto con el cambio físico al que se sometió, y habrá quienes sientan esta caracterización fuera del ambiente de la película, por lo que dependiendo de los gustos o puntos de vista de apreciación actoral de cada uno de ustedes les podrá agradar o no esta caracterización. Finalmente el soundtrack que contiene este largometraje es exquisito (sobre todo si aman las gloriosas épocas de los 80´s y 90´s) con piezas de Blondie, Eurythmics, Donna Summer o New Order (los hará cantar, se los aseguramos). No hay más que decir, simplemente disfruten de este filme con una copa de vino porque les encantará el estilo que tiene y recuerden... Padre, Hijo y La casa Gucci.
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